Hola voladoras,
Ya veníamos diciendo desde hacía un tiempo que nos merecíamos unas vacaciones, y las
marcas del bikini demuestran que nos hemos tomado unas de las buenas. Pero como a nosotras nuestro trabajo nos apasiona, decidimos mezclar
deber con placer e irnos al Pomelo Fest: tres días de música, playa y gente deliciosa en Estepona.
El viernes comenzó en el Louie Louie con
Los Últimos Bañistas. Este grupo se compone de todo lo que a nosotras nos gusta: buena música, murcianos,
acento gallego y chicos
Grrr. Confesamos que ya llegamos bastante tupis al concierto por culpa de los organizadores del festival, que decidieron que sería una magnífica idea poner los gintos a 3.5€ en el Bikini Beach, el chiringuito oficial del evento. Pero como somos gente súper responsable, nada más llegar al concierto nos pusimos las gafas de miopes para escanear bien a los chicos que estaban sobre el escenario y, voilá, hubo un ganador para todas nuestras categorías:
Alex, el baterista, no solo estaba increíblemente beneficiable, sino que jamás habíamos visto tanto
careto de placer en un músico al tocar. Era nuestro hombre.
Después de los bañistas, vinieron Izal. No sabíamos que Pau Gasol cantara tan bien, la verdad. Y llamadlo casualidad o vicio pero nos volvió a parecer súper follable Alejandro el baterista. Con Izal aprendimos muchas cosas: que un tío de dos metros no queda tan ridículo con un ukelele y que si te pones las
manos en la boca así como para aullar, todo suena genial.
Al acabar los conciertos volvió a sonar la música en el Louie Louie y cual fue nuestra sorpresa cuando escuchamos Havalina por los altavoces en honor al Pomelo 2011. Estos chicos son unos
sentimentales. Nuestra noche terminó con más gintos, DJ Serio, Juan Antonio HR y baños
en bolas en la playa. Un sufrimiento, vamos.
El sábado nos trasladamos cuanto antes a la playa del Bikini Beach con el objetivo de catar algún cuerpo de músico follable: hubo éxito. Desde nuestra toalla les vimos chapotear y salir a
cámara lenta del agua mientras gotas saladas resbalaban por sus despampanantes torsos. Todo mentira, nos quedamos dormidas en la toalla y nos
quemamos con el sol.
A las 19h estábamos ya emplazadas en la Plaza Ortiz, ginto en mano y viendo a Shonen Bat y a Siberian Girls rodeados por
señoras con permanente y bailarines de 4 a 8 años. Todo muy post-barroco.
I per fí, en el número u, el millor dels millors: BETUNIZER a.k.a. ¿Quieres manteca? Pues toma
dos tazas. Este trío valenciano nos ha robado el corazón y la capacidad de mover el cuello en tres semanas. Como bien dijimos en nuestro twitter, eso es un bajista y lo demás es mierda de
paloma. El bajista con sus dedos, el baterista con su cencerro y el cantante con su follabilidad consiguieron que todo lo mal que lo estábamos pasando en el festival pareciese poco. El grupo traía a su propio club de fans y en el louie louie olía a pedo pero a nosotras nos daba todo igual.
Para cerrar los conciertos del sábado nos pegamos otra disfrutada viendo a (lo:muêso) (nö vêa cΘn ël nômbrësitô:prîmö). Aunque con la sonrisa que gastaba Alfonso creemos que fue él quien
disfrutó del concierto más que todos los asistentes juntos. Estos tíos son unos
cracks y, al haber
discrepancia entre nosotras por quién era el más follable, al final nos quedamos sin darle la braga a ninguno de ellos. Perdonadnos, chicos.
Y de nuevo noche, DJ Serio, Juan Antonio HR, gintos,
birras, chupitos, puertas cerradas, bragas en la cabeza, pocos recuerdos y buenas sensaciones.
El festival lo cerró el monologuista/cantante Santi Araujo son sus gafas 3D, sus tatuajes grr, su cogote moreno y su
“hola chica, hola chiiico”. Santi, te queremos porque diseñas muy bien, cantas aún mejor y estás
mu rico, pero que metieras nuestra preciosa braga rosita con lacito, elegida de entre nuestra mejor lencería en exclusiva para ti, en la guitarra de Juanma… malamente. Nos consuela que a lo mejor no te diste cuenta de que no te dabas cuenta de que la metías ahí dentro mientras cantabas.
Y así terminó nuestro idílico fin de semana es Estepona. La noche del domingo soñamos con Alex, el más follable de Los Últimos Bañistas, bebiendo GinTos con Pomelo en el Louie Louie junto a Jose Luis Moreno con la voz de Santi Araujo, ambos en bragas.
True story.
Adiós festival.
PD1: Cierto es que Estepona no es Marbella, pero bien que los marbellíes os financiamos el festival con nuestra asistencia al evento.
PD2: Un saludo a la novia de Jose, el cantante de Betunizer, que andaba el pobre muy agobiado cuando le hicimos entrega de su merecida braga.
*Fotografías por Ana Inés Gallo Frías, gracias buenorra.
